Importancia del buen dormir
¿Eres una de las más de 2.000 millones de personas que padecen algún trastorno del sueño? Entonces seguramente padeces las consecuencias de un mal descanso nocturno: irritabilidad, falta de concentración, dificultades para cumplir con las obligaciones sociales y laborales… Dormir bien es, por una parte, casi un imperativo de la vida moderna, pero justamente el estrés y las exigencias son una de las principales causas de la falta de un sueño reparador.¿Por qué dormimos?
Casi puedo escuchar tu respuesta: dormimos porque estamos cansados. Sin embargo, la respuesta no es tan sencilla. El sueño es un fenómeno elemental e indispensable de la vida humana que resulta de un cambio que se produce cada 24 horas en nuestro sistema nervioso central, estrechamente vinculado con la edad y el neurodesarrollo. En realidad, todavía se sabe muy poco acerca de la fisiología del sueño pero mucho más sobre las consecuencias de un sueño insuficiente o de mala calidad. Es decir que no sólo dormimos porque estamos cansados sino porque nuestro organismo necesita periódicamente disminuir ciertas funciones a fin de realizar otras igualmente imprescindibles, y nos señala el momento de ir a dormir en base al llamado “ritmo circadiano”. De hecho, el sueño es tan importante que pasamos casi un tercio de nuestra vida … durmiendo.Dormir bien… ¿un sueño inalcanzable?
Como puedes ver, nuestro organismo necesita que le brindemos las horas de sueño necesarias. Sin embargo, no alcanza con “dormir” seis u ocho horas diarias sino que es necesario que esas horas sean realmente provechosas, para despertar con renovadas energías. En realidad, mucha gente se levanta cansada y dolorida como consecuencia de un sueño poco reparador. El descanso insuficiente responde a múltiples causas, ya que en general nos vamos a dormir en condiciones poco favorables para conciliar el sueño. Agotados, estresados, ansiosos, en ambientes ruidosos y horarios alterados, después de cenar en forma abundante o ingerir bebidas estimulantes como alcohol o café, junto con el hábito de fumar o ingerir otro tipo de sustancias.Algunos consejos
para un buen dormir
Alcanzar un sueño reparador no es imposible; sigue nuestros consejos y… ¡dulces sueños!
Adquiere el hábito del sueño:
procura ir a dormir siempre a la misma hora; acuéstate aunque no tengas sueño, toma un baño caliente, lee o practica algunos ejercicios de relajación a fin de conciliar el sueño.

Foto de Kha Ruxury en Pexels
Duerme la cantidad de horas que necesites de acuerdo a tu edad y actividad.
Procura tomar una siesta de 20 a 30 minutos, te ayudará a no llegar a la noche agotado y ansioso..
Crea un ambiente propicio para el descanso: tranquilo, silencioso y fresco.
Toma una cena liviana (recuerda el clásico refrán: “desayunar como un rey, almorzar como un príncipe, cenar como un mendigo”), una o dos horas antes de acostarte. Evita las comidas muy condimentadas o estimulantes. Prefiere alimentos naturales o ricos en hidratos de carbono; evita las carnes y las grasas.
Elige un buen colchón: que te garantice descanso y comodidad, adaptado a tus gustos y necesidades. En la actualidad hay una gran variedad de modelos, medidas y materiales, pero hay algunos criterios universales:
Largo: 10 a 20 cm. Más que tu altura
Ancho: como mínimo 90cm para quienes duermen solos y 150cm para parejas
Firmeza: ni demasiado duro ni demasiado blando; la espalda debe apoyarse completamente.
Resistencia y durabilidad: la vida media de un colchón se calcula en 12 años.
El colchón nuevo no debe crujir ni sonar. Se recomienda rotarlo cada tres meses para evitar las deformaciones.